Denominaciones de Origen de Aragón
Me van a permitir comenzar este artículo sobre las Denominaciones de Origen de Aragón contando un chiste que, a su vez, me contaron en Zaragoza hace muchos años (lo hizo un maño) y que es representativo del carácter obstinado que se atribuye al aragonés:
“Iba un maño andando por un camino y se le aparece Dios, y le pregunta: “¿A dónde vas? -a lo que el maño responde -”a Zaragoza”. Dios, molesto, le responde: “eso será si Dios quiere”. Y el maño insiste: “yo voy a Zaragoza”. Dios, cabreado, hace un hoyo muy profundo y le mete dentro, donde permanece por días. Al cabo de un tiempo regresa Dios, le saca, y le vuelve a preguntar: “¿me vas a decir ahora a dónde te diriges?”. A lo que el caminante vuelve a responder: “a Zaragoza”. Dios, molesto de nuevo, le exhorta: “¡eso será si Dios quiere!”. Y él vuelve a insistir en que no, que él va a Zaragoza. Dios, enfadadísimo, le devuelve al hoyo y esta vez le mantiene durante meses. Pasado este tiempo Dios regresa a por él y vuelve a repetirse la escena anterior por lo que Dios monta en cólera y le envía de nuevo al agujero donde le deja por años. Al cabo de mucho, mucho tiempo Dios regresa a por él convencido de que ha aprendido la lección y de que esta vez, sí, le va a decir que va a Zaragoza con su beneplácito. Cuando llega a donde está el maño le pregunta: “¿Dónde vas?”, a lo que el primero responde:”al hoyo”…”
¿Qué por que empiezo un artículo que habla de vinos con denominación de Origen de Aragón con un chiste sobre maños? Pues porque esa obstinación que demuestra el protagonista de esta historia y que, a la sazón, se les achaca a los maños es la misma de unas viñas empeñadas en crecer y dar fruto, contra todo pronóstico, en unas tierras pedregosas, duras, en ocasiones inhóspitas, y muchas veces cuasi desérticas, como son las campiñas aragonesas. Allí donde el “cierzo” barre inmisericorde los campos con un frío cortante, donde los inviernos se hacen eternamente helados y los efímeros veranos con sus días de bochorno y sus heladas noches, allí se ha afanado el perseverante agricultor aragonés a lo largo de generaciones por hacer que la vida brote en forma de vid para luego elaborar vinos con su fruto, como ya hicieran los celtas y romanos que poblaron estas tierras. Son los vinos de las DO de Aragón, como los aragoneses, vinos con un fuerte carácter y una personalidad arrolladora. Con colores y aromas intensos, los tintos, aunque ciertamente frescos por la acidez que adquiere la uva como consecuencia de los marcados cambios térmicos. La Garnacha y la Cariñena son las dos uvas por antonomasia, aunque el cultivo de variedades foráneas como la Cabernet-Sauvignon, Merlot y Sirah está muy extendido, acaso por la gran influencia que tuvieron los franceses a finales del siglo XIX en estos lares como consecuencia de la plaga de la filoxera, que arrasó los viñedos franceses y supuso un aumento de la producción vitivinícola a este lado de la frontera. En cuanto a los blancos, son frescos, ligeros, con aromas florales. Predomina la garnacha Blanca y la uva Macabeo.
Cinco son las DO de Aragón
De las cinco denominaciones de origen de Aragón, cuatro son denominaciones de origen protegidas de vino y una de vino de pago. Las cuatro DOP son: Cariñena, que es la Denominación de Origen más antigua de Aragón, Campo de Borja, Calatayud y Somontano. En la región aragonesa se elaboran también cavas, que es en si misma una Denominación de Origen Protegida, aunque de ámbito supra autonómico dado que este tipo de vinos se elabora, además, en Álava, Badajoz, Barcelona, Girona, La Rioja, Lleida, Navarra, Tarragona y Valencia. En Aragón se incluyeron en la zona geográfica de la DOP Cava los municipios de Ainzón (Campo de Borja), y Cariñena, y como excepción fuera de ésta a Bodegas Langa en Calatayud, lo que convierte a Aragón en la tercera zona productora de este vino espumoso de España. Además, la Comunidad cuenta también con el reconocimiento de un vino de Pago, Aylés, que es el único de Aragón y uno de los dieciocho que están inscritos en España.
Aragón en definitiva es un destino ideal para la práctica del enoturismo ya que, amén de las bodegas y sus vinos, el visitante disfrutará de una naturaleza agreste, en muchos casos abrumadora, un impresionante y copioso patrimonio histórico artístico, una gastronomía envidiable y, sobre todo, de una gentes amables y acogedoras.
Descubre las Denominaciones de Origen de Aragón
En los siguientes enlaces podrás encontrar más información sobre cada una de las Denominaciones de Origen comprendidas dentro de la región de Aragón. En estos artículos descubrirás su historia, la orografía de sus viñedos, los tipos de uva, vinos, bodegas y mucha más información interesante para el enoturista.
Denominación de Origen Calatayud
Denominación de Origen Campo de Borja
